La Guardia Civil puso ayer a disposición judicial al empresario oriolano Ángel Fenoll por un presunto delito medioambiental en la finca Los Corrales
Agentes de la Guardia Civil de la Región de Murcia, en la denominada operación “Subterráneo II”, desarrollada durante los últimos meses, detuvieron el día de ayer a Ángel Fenoll, administrador de un vertedero de residuos ubicado en el término municipal de Abanilla, como presunto autor de un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente.
Las investigaciones se iniciaron en el mes de noviembre de 2010, cuando la Guardia Civil constató graves irregularidades en uno de los vasos del vertedero de la localidad de Abanilla. Las actuaciones posteriores llevaron a los agentes hasta una finca de limoneros del mismo término municipal, donde el pasado mes de marzo se sorprendió a varios camiones descargando ilegalmente toneladas de basura en un foso de unos 4.000 metros cuadrados de superficie y varios metros de profundidad.
Los residuos eran inmediatamente sepultados por maquinaria pesada expresamente dedicada a dicha labor con el objetivo de evitar su descubrimiento. De hecho, la cavidad realizada para el enterramiento de las basuras estaba ya prácticamente colmatada. Por tales hechos, la Guardia Civil procedió a la detención, el pasado mes de abril, de 5 personas por un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente. Entre ellos, Javier Bru, concejal de Turismo del Partido Popular en la localidad alicantina de Albatera, y hombre de confianza de Fenoll.
Las investigaciones continuaron, tras todo ello, en las instalaciones del vertedero de residuos de Abanilla, el cual cuenta con todas las autorizaciones ambientales para su funcionamiento, y trata, según las actuaciones practicadas, residuos sólidos urbanos de varias localidades de la Región de Murcia, como la propia Abanilla, Santomera, Fortuna y Beniel, además de otras poblaciones de la provincia de Alicante como Elche, Orihuela o Torrevieja. Dicho vertedero era el lugar donde deberían haber llegado los residuos que, finalmente, estaban siendo desviados al campo de limoneros utilizado como vertedero ilegal por enterramiento.
En terrenos anejos a los del vertedero legal de la localidad de Abanilla, la Guardia Civil descubrió la existencia de ciertas zonas donde podrían haber sido sepultados, sin autorización, importantes cantidades de residuos, donde han sido identificados varios tipos de hábitat de interés medioambiental que incluyen especies de flora protegidas a nivel autonómico y diferentes especies de fauna igualmente de interés.
Tras todo ello, personal de la Guardia Civil y de la Dirección General de Planificación, Evaluación y Control Ambiental de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, realizaron hasta 6 prospecciones en 4 zonas diferentes del vertedero, al objeto de comprobar la existencia de dichos enterramientos ilegales de residuos. Los trabajos, que se prolongaron durante 6 días y fueron realizados por una empresa especializada en la realización de este tipo de actividades, concluyeron con el hallazgo de residuos a diferentes profundidades, hasta un máximo de 15 metros. Entre los residuos hallados se encontraban materia orgánica altamente degradada, pilas alcalinas, plásticos, cartón, envases de aluminio y cristal.
De todo ello, la Guardia Civil recogió las correspondientes muestras, que fueron enviadas, para su análisis, al laboratorio de Medio Ambiente del Servicio de Criminalística de la Dirección General del Cuerpo.
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